Este apartado cumple el propósito de llevar al público una colección de relatos actuales, escritos por autores contemporáneos. Se parte de esta revolución literaria comentando y compartiendo sus trabajos.
Encontré este relato en mi interminable búsqueda de inspiración. Siento que es una excelente ayuda para imaginar el universo de los seres que no comparten nuestros sentidos. Espero que lo disfrutes.
No era un tipo vanidoso ni jactancioso, pero solía envanecerse y le resultaba divertido cuando algún crítico literario, un profesor de la universidad o un colega del gremio de escritores lo señalaba como el más brillante prosista de su generación injustamente tratado
Al pie de la Biblia abierta –donde estaba señalado en rojo el versículo que lo explicaría todo– alineó las cartas: a su mujer, al juez, a los amigos. Después bebió el veneno y se acostó. Nada. A la hora se levantó y
Membrete Arsénico López. Agencia matrimonial Plaza de la Separación, 2-1. Huelva La nota debió leerla a primera hora de la tarde, eso dijo la policía, pues sólo entonces acudía a la oficina, donde trabajaba hasta las ocho o las nueve, justo la
Me fui a vivir al barrio en vísperas de sus fiestas patronales. La animación era grande y el programa de actos interesante y exhaustivo. Un torneo de ajedrez entre vecinos me llamó la atención y decidí inscribirme. Conocía algo de este juego,
Cada tarde, a la salida de la escuela, los niños se iban a jugar al jardín del Gigante. Era un jardín amplio y hermoso, con arbustos de flores y cubierto de césped verde y suave. Por aquí y por allá, entre la
Recuerdo la primer vez antes de entrar al trabajo pase a una pequeña cafetería recién inaugurada entré y dije: -Buenos días me das un americano sin azúcar. La chica de espaldas respondió -¡Buen día!, Si, con mucho gusto. Luego me miró y
Cuando su hermana Luna abandona su viaje alrededor de la bóveda celeste, acompañada de su corte de somnolientas doncellas, el Sol se levanta en su palacio de mármol, preparado para emprender una nueva cabalgata. Aurora ya ha partido para adelantarlo y alentar
o soy de las que se tiran a la piscina, de las que, cuando descubren algo interesante, bucean hasta el fondo. No es un océano de conocimientos con sólo cincuenta centímetros de profundidad, sino que es una laguna enorme con dos o
Carta número uno Querido Ricardo: Hoy me ha ocurrido algo extraordinario, he ido como todas las mañanas a la oficina de correos a recoger nuestra correspondencia y me he encontrado un envío a mi nombre de la editorial Rosenburg, un voluminoso libro
En las veredas partidas, cuajaban los mendigos. Esquivé y pisé unos cuantos, en las treinta cuadras circulares, que me llevaron a la casa del Rey. Curiosamente las rejas se abrieron, y dos gigantescos guardias con cabezas de perro, me cerraron el paso.