Sombras que Persiguen

Sintiendo el poder de controlar todo a su alcance. Seguro de que este día se desarrollaría de una manera diferente. Damián se embarcó en un nuevo viaje al mundo exterior. Tranquilo, se repitió a sí mismo, mientras caminaba cerca de un camino ruidoso. Todo estará bien.

Su conciencia lo mantuvo relativamente tranquilo. Estaba seguro de que todo saldría como lo había planeado. Cada paso lo alejaba de su último hogar, de los lugares que conocía. Damián vio por primera vez un gran edificio decorado con plantas que colgaban de sus paredes.

La curiosidad lo ayudó a caminar sin miedo a lo desconocido. Todo será diferente. Tan pronto como llegó a la entrada vio a un hombre extraño junto a la puerta, vestía un uniforme negro. Damián giró de inmediato, dándose cuenta de que había cometido un error, pero no había nadie detrás de él.

Todo está en tu imaginación, se dijo a sí mismo.

Damián trató de actuar con normalidad y entró al centro comercial. Al menos eso es lo que pensó, mientras se desplazaba al ritmo de una melodía en su cabeza, y aceleró el paso tan pronto como pasó al guardia. Esto tiene que ser una trampa.

La frustración se apoderó de Damián cuando se dio cuenta de que sus planes empezaban a fallar. ¿Por qué me buscan? ¿Acaso no pueden entender que estoy tratando de alejarme de ellos?

Tomó la primera a la derecha y se sintió a salvo lejos del guardia. Entonces Damián se detuvo y giró para ver si alguien lo perseguía. El centro comercial estaba lleno de extraños, le fue imposible distinguir a los que lo estaban buscando.

Nadie te persigue, pensó. Relájate. Respirar

Damián siguió caminando con indiferencia. Admirando la gran pared de vidrio frente a una tienda. Esperando una señal para confirmar sus sospechas. Prestando atención a las personas que caminan cerca. Había demasiados, Damián no podía distinguir a la gente que lo perseguía del resto, y su corazón comenzó a acelerarse. Ahora era obvio que había caído en su trampa.

Sigue actuando con normalidad, pensó, busquemos una manera de salir de aquí.

Vio a una persona salir de un pequeño pasillo y caminó hacia allá para esconderse. ¿Qué voy a hacer? pensó, sacando una pistola de su mochila. Hay demasiados de ellos.

La mano de Damián comenzó a temblar, mientras escondía el arma detrás de su espalda.

Respira y espera a que ellos den el primer paso. La mayoría de estas personas no deben formar parte de la trampa.

Damián caminó por el pasillo para encontrar una salida hasta que llegó a un callejón sin salida. Tiene que haber otra salida, pensó y regresó al gran salón del centro comercial. Intentando caminar sin llamar la atención, pero el miedo lo hacía casi imposible. Estudió cuidadosamente a todas las personas que caminaban cerca e imaginó sacando su arma para defenderse.

Esta era la peor trampa en la que había caído, Damián estaba seguro de que alguien estaba a punto de atacar y se sentía atrapado. Solo quiero una vida normal. Como la gente que camina a su alrededor, inconsciente de los peligros detrás de la sociedad secreta. Libre del miedo constante a ser atrapado.

Damien no podía recordar un momento de su vida en el que no estuviera huyendo de ellos. Ni siquiera de niño. Siempre lo habían perseguido. Tenía algo que ellos necesitaban.

Cálmate, pensé tan pronto como vio una señal de salida. Todo estará bien.

Caminó hacia el letrero….

«Señor, ¿le gustaría probar uno de estos …» dijo una hermosa joven ofreciendo muestras en una charola.

«Sé lo que estás haciendo», dijo Damián y sacó su arma.

La mujer se quedó paralizada cuando vio que el arma que la apuntaba y dejó caer la charola. El extraño hombre detrás del arma parecía agresivo y listo para disparar.

«No me atraparás vivo», dijo y levantó su arma para disparar al techo.

Los más cercanos al disparo se lanzaron al suelo, mientras que el resto de la gente en el centro comercial se detuvo y giraron en dirección del estruendo.

La multitud comenzó a correr en busca de la salida más cercana. Damián también corrió con ellos y se sintió cómodo siendo parte de la multitud. Eran como un equipo con el mismo objetivo. También querían escapar de la gente que lo buscaba.

Damián se dejó llevar por el grupo y ocultó el arma.

No pueden atraparnos ahora, pensó y salió corriendo del centro comercial.